En un Florencia desgarrada por la peste negra, la angustia y el miedo se han apoderado de la ciudad. A medida que la enfermedad se difunde, los habitantes se ven obligados a enfrentar no solo la muerte, sino también sus propios demonios internos. Entre ellos encontramos a un joven médico, apasionado y esperanzado, que lucha por salvar vidas en medio de la desesperación. Su determinación lo lleva a desafiar a las autoridades, que han optado por aislar a los enfermos y abandonar a los suyos.