En medio de tensiones raciales y conflictos territoriales, un agente del FBI de ascendencia nativa americana se ve obligado a enfrentar sus raíces mientras investiga un asesinato en una reserva indígena. Ray Levoi, un hombre que ha vivido desconectado de su herencia, es enviado a un remoto pueblo en Dakota del Sur, donde las viejas heridas y el resentimiento entre la comunidad nativa y el gobierno estadounidense están más vivos que nunca.