Baby Bink no podía pedir más; tiene padres adoradores (aunque algo enfermos), vive en una gran mansión, y está a punto de aparecer en las páginas sociales del periódico. Desafortunadamente, no todos en el mundo son tan agradables como los padres de Bink; especialmente los tres secuestradores emprendedores que pretenden ser fotógrafos del periódico. Secuestrando con éxito a Baby Bink, tienen más dificultades para mantenerse a la defensiva, que no sólo se mantiene un paso por delante de ellos, sino que parece ser más que un poco más inteligente que los tres malditos criminales.
El doctor Richard Kimble es un prestigioso cirujano de Chicago con una vida prácticamente perfecta: una bella esposa, una casa de lujo en un elegante barrio de Chicago... Su vida se desmorona el día que su mujer es brutalmente asesinada en manos de un misterioso hombre manco. Kimble es acusado del crimen y, aunque él es inocente, es sentenciado con la pena de muerte. Camino de la cárcel, el autobús donde es transportado Kimble sufre un accidente de tráfico. Varios prisioneros consiguen escapar, entre ellos el propio Kimble.