En una búsqueda desesperada por revitalizar la imagen de un partido político maltrecho, un senador de Washington, Mays Gilliam, se convierte en el inesperado candidato a la presidencia tras la muerte del actual candidato. Interpretado por Chris Rock, Mays es un hombre común que nunca se imaginó en un papel tan alto. Con una campaña llena de tropiezos y situaciones incómodas, Mays debe lidiar con la presión de sus asesores políticos, que pretenden convertirlo en un títere perfecto, mientras él intenta mantener su autenticidad y conectar con la gente común.

En el corazón de Washington D.C., el caos se desata cuando un asesinado se lleva a cabo dentro de la Casa Blanca. La víctima, una joven mujer, es descubierta en un baño de la residencia presidencial, lo que provoca un escándalo de proporciones épicas. Para investigar este crimen intrigante, se asigna un detective de homicidios de la policía de D.C., el sargento teine eso muy claro: su enfoque directo y su instinto agudo son una mezcla explosiva que no le teme a nada ni a nadie, ni siquiera a la política.

Un veterano agente de seguridad presidencial, Frank Horrigan, es un hombre marcado por el pasado. Durante su juventud, fue parte del equipo que no pudo detener el asesinato de JFK, una experiencia que lo persigue hasta el presente. La vida de Frank da un giro inesperado cuando un astuto y despiadado francotirador amenaza la vida del actual presidente de los Estados Unidos. Este asesino, que se hace llamar Mitch Leary, es un ex agente de la CIA convertido en un experto manipulador, que ve la oportunidad de demostrar su habilidad y desafiar a las autoridades.