En la bulliciosa Europa de finales del siglo XIX, la historia se centra en la influyente y controvertida familia Rothschild, cuyos miembros están profundamente enredados en el entramado financiero y político de la época. El patriarca, magistralmente interpretado, es un hombre astuto que navega por las traicioneras aguas de la banca y los negocios, mientras sus hijos, cada uno con su propia personalidad y ambiciones, luchan por ganar su lugar en un mundo dominado por la élite.