En un futuro no muy lejano, la humanidad ha desarrollado robots avanzados llamados "mechas", capaces de simular emociones y comportamientos humanos. En este mundo distópico, un niño llamado David es creado por una compañía para ser el primer "niño" de la especie. Sin embargo, David no es un niño común; es un modelo de inteligencia artificial que anhela amor y aceptación. Su principal deseo es hacer que su madre adoptiva, Monica, lo ame de verdad.

En el mundo del deporte profesional, Jerry es un brillante agente que ha llegado a la cima gracias a su carisma y habilidad para vender a sus clientes. Sin embargo, tras una crisis de conciencia, decide que la industria necesita un cambio y se atreve a redactar un manifiesto en el que propone una representación más humana y auténtica de los atletas, priorizando sus necesidades y el bienestar emocional. Pero, cuando comparte su visión en una reunión de la empresa, es despedido casi instantáneamente.