En octubre de 1993, una unidad de élite del Ejército de Estados Unidos es enviada a Mogadiscio, la capital de Somalia, para realizar una misión en plena guerra civil. Sin embargo, lo que parecía ser una misión sencilla se convierte en una pesadilla.
Jack Carter trabaja en Las Vegas como asesino a sueldo; se encarga de ajustar las cuentas a quienes no pagan sus deudas. Sus métodos son expeditivos y violentos. Sin embargo, llega un momento en que el hastío que le produce su oficio provoca en él un drástico cambio en su forma de pensar, en su concepto del honor y de la familia.
Un detective (Steven Seagal) de Los Ángeles relaciona los homicidios de un asesino en serie con un magnate (Bob Gunton) que está eliminando a sus socios de negocios.