Tras un accidente de tren, todos los pasajeros resultan muertos, excepto David Dunn. Elijah Price, un misterioso desconocido, le plantea una extraña hipótesis que explicaría por qué David ha salido indemne del accidente, pero esta explicación, de ser cierta, podría cambiar para siempre la vida de David y la de su familia.
Una simpática joven heterosexual (Aniston) conoce a un gay encantador (Paul Rudd) y le propone compartir piso. Pronto simpatizarán y se harán grandes amigos; pero los sentimientos que ella experimenta hacia él y un embarazo por sorpresa amenazan con destruir una convivencia casi ideal.