En un caluroso y tenso pueblo del sur de Estados Unidos, un prominente empresario es encontrado asesinado en su mansión, desatando un torbellino de racismo y tensión social. La policía local, poco acostumbrada a lidiar con delitos complejos, detiene de inmediato a un sospechoso, pero lo que no saben es que este hombre es un investigado detective de la policía de Filadelfia. Su nombre es Virgil Tibbs, y, aunque es un hombre negro en un entorno hostil, está decidido a resolver el crimen.