En una mansión antigua y apartada, una joven institutriz es contratada para cuidar a dos huérfanos, Flora y Miles, después de la misteriosa muerte de sus padres. Al llegar al opulento hogar, se encuentra con un ambiente marcado por la intriga y el secreto. Desde el principio, la institutriz nota que hay algo extraño en la relación entre los niños, quienes parecen estar más conectados con el pasado oscuro de la propiedad de lo que debería ser natural.