En esta hilarante y disparatada secuela, Harold y Kumar están listos para disfrutar de un tranquilo viaje a Ámsterdam. Todo parece ir sobre ruedas hasta que un pequeño malentendido en el aeropuerto les convierte en los principales sospechosos de un complot terrorista. Después de ser atrapados con un dispositivo que parece sospechoso, nuestros héroes terminan en las garras de las autoridades, siendo llevados a Guantánamo Bay.

En un mundo lleno de secretos y traiciones, un ex-policía con un pasado oscuro se ha reinventado como un limpiador profesional de escenas del crimen. Su trabajo consiste en eliminar cualquier evidencia y hacer que los lugares de tragedia vuelvan a la normalidad, todo mientras se desliza entre las sombras y lucha con sus propios demonios internos. Un día, se ve envuelto en un caso inesperado cuando se le asigna limpiar un apartamento tras un asesinato brutal. Sin embargo, lo que al principio parece ser solo otro trabajo rutinario se convierte en una pesadilla.