En el emocionante desenlace de la saga, Bella ha dado a luz a Renesmee, una bebé híbrida que es tanto humano como vampiro. Sin embargo, la felicidad de su nueva vida se ve amenazada cuando un malentendido provoca que los Vulturi, la poderosa y temida coven de vampiros, la consideren un peligro. Con la vida de Renesmee en juego, Bella, Edward y su familia deben reunir a aliados de todo el mundo para demostrar que su hija no es una amenaza.

En esta épica entrega de una saga que ha capturado corazones alrededor del mundo, Bella Swan se encuentra en un momento crucial de su vida: está lista para casarse con Edward Cullen, el vampiro de sus sueños. La pareja se embarca en una celebración romántica que, aunque llena de amor, también desata una serie de complicaciones. Tras su luna de miel en la idílica Isla Esme, Bella descubre que está embarazada, pero este no es un embarazo cualquiera; el feto crece a una velocidad alarmante, poniendo en riesgo la vida de Bella y agitándoles la vida a todos los miembros de la familia Cullen.

En un mundo donde los vampiros y los hombres lobo están en conflicto, Bella Swan se encuentra atrapada en el medio de una lucha épica mientras lidia con sus intensos sentimientos por Edward Cullen, un vampiro centenario, y Jacob Black, un feroz hombre lobo. Bella está decidida a convertirse en vampiro para unirse a Edward para siempre, pero el conflicto entre las razas sobrenaturales plantea riesgos difíciles de enfrentar.

Bella Swan, tras vivir un vibrante y peligroso episodio en el cumpleaños que celebraron con los Cullen, se enfrenta a la dura realidad de ser mortal en un mundo de vampiros. Un accidente en la fiesta la deja herida, lo que provoca que Edward Cullen, su enamorado vampiro, se replantee su relación. Para proteger a Bella de los peligros que su existencia conlleva, Edward decide abandonarla, dejándola sumida en una profunda tristeza.