En una Londres victoriana oscura y melancólica, el respetado doctor Henry Jekyll lleva una vida dedicada a la medicina y a la búsqueda del conocimiento. Pero en su interior arde una lucha entre el bien y el mal. Jekyll comienza a experimentar con una poción que, según él, puede separar las dos mitades de la naturaleza humana. Deseoso de liberar sus instintos más primitivos, decide probar su invento en sí mismo.