Durante la Segunda Guerra Mundial, un destructor estadounidense, al mando de un comandante al que la tripulación creía poco experimentado pero que resulta ser un gran estratega, encuentra un submarino alemán al que persigue por todo el Atlántico.
Un tiránico y manipulador productor de cine (Kirk Douglas), que ha caído en desgracia, pide ayuda a un director (Barry Sullivan), a una actriz (Lana Turner) y a un guionista (Dick Powell), a los que ayudó a triunfar, pero que tienen sobradas razones para detestarlo. Los tres le reprocharán su falta de escrúpulos para alcanzar el éxito sin reparar en las personas a las que traicionaba o engañaba.