En un pequeño pueblo inglés en los años 30, la vida parece transcurrir plácidamente, marcada por tradiciones y un aire de nostalgia. La trama se centra en el carismático pero solitario profesor de literatura, cuyo amor por las palabras lo ha aislado de su entorno. Se siente atrapado entre la modernidad que avanza a pasos agigantados y el anhelo de un tiempo más simple.