En un rincón perdido de la selva africana, un joven huérfano llamado Tarzan es criado por una familia de gorilas tras la trágica muerte de sus padres. Desde niño, aprende a comunicarse con los animales y a sobrevivir en un entorno salvaje, lo que le establece un vínculo especial con la naturaleza. A medida que crece, su curiosidad por el mundo exterior lo lleva a descubrir su propia identidad, así como la cultura humana.