En el ocaso del siglo XIX, una tranquila comunidad fronteriza se convierte en el epicentro de una inminente crisis. La vida de los colonos en un remoto pueblo es interrumpida cuando una horda de nativos americanos, descontentos por las incursiones en sus tierras, inicia una violenta venganza. La tensión crece cuando varios habitantes, incluidos rancheros y comerciantes, son secuestrados, lo que despierta el sentimiento de lucha y la necesidad de rescate entre los sobrevivientes.