En esta comedia musical de los años 60, seguimos la historia de un joven y carismático cantante llamado Rusty, interpretado por Elvis Presley. Rusty tiene una vida más que tranquila en su ciudad natal, donde pasa sus días cantando y disfrutando con sus amigos. Sin embargo, la vida de fiesta y diversión que lleva se ve interrumpida por un compromiso inesperado: su amigo, el dueño de un complejo turístico, le pide que pase el fin de semana cuidando a su hija, una chica hermosa pero ingenua que apenas conoce a los chicos.