Un hombre en busca de venganza se infiltra en un rancho, oculto en una región inhóspita, donde su dueña, Altar Keane, da cobijo a los forajidos que huyen de la ley a cambio de un precio.
Choya (Alan Ladd), un pistolero errante, conoce a un forajido que lo convence para que se haga pasar por el hijo de un rico ranchero de Texas que fue secuestrado veinticinco años antes y del que no se sabe nada desde entonces.
En el rancho "Las furias" viven T. C. Jeffords y sus dos hijos. Clay, que es un buen chico, no tiene carácter, Su hermana Vance, en cambio, es ambiciosa aunque justa. El patriarca desea expulsar de sus tierras a una familia de mexicanos, los Herrera, cuyo primogénito es amigo de la infancia de su hija.
Un agente federal viaja hasta un país de Sudamérica para localizar a un peligroso grupo de contrabandistas dirigidos por un acaudalado y mujeriego norteamericano. Una vez allí se sentirá irremediablemente atraído por la esposa de uno de los jefes de la organización criminal.
Clay Hardin decide dejar su refugio en México y volver a San Antonio para investigar los frecuentes robos de ganado que se producen en Texas. El recién llegado sospecha que el jefe de la banda de ladrones es el dueño de un saloon, en el que trabaja una joven cantante de la que se enamora.