En el vibrante y caótico escenario de Nueva York durante la década de los 80, un fenómeno cultural está en pleno apogeo: el graffiti. Este documental ofrece una mirada íntima a la vida de jóvenes artistas urbanos que han tomado las calles como su lienzo, expresando su creatividad y desafío a la norma a través de aerosol y color. Con la ciudad como telón de fondo, los protagonistas son escritores de graffiti, conocidos como "grafiteros", que luchan por dejar su huella en un mundo donde su arte a menudo es visto como vandalismo.