En un futuro no tan lejano, la realidad y la virtualidad se entrelazan en un inquietante laberinto, donde la tecnología ha evolucionado a tal punto que los videojuegos se han convertido en un espejo distorsionado de nuestras vidas. El protagonista es un talentoso programador que, al desarrollar un juego revolucionario, se encuentra atrapado en un dilema ético cuando su creación cobra vida.