En la bulliciosa Europa de finales del siglo XIX, la historia se centra en la influyente y controvertida familia Rothschild, cuyos miembros están profundamente enredados en el entramado financiero y político de la época. El patriarca, magistralmente interpretado, es un hombre astuto que navega por las traicioneras aguas de la banca y los negocios, mientras sus hijos, cada uno con su propia personalidad y ambiciones, luchan por ganar su lugar en un mundo dominado por la élite.

En un idílico pueblo alemán, la vida cotidiana transcurre entre tradiciones y la calidez de la comunidad. La historia sigue a una familia que ha vivido en la región durante generaciones, enfrentándose a los cambios sociales y culturales que trae consigo el avance del tiempo. Con la llegada de la industrialización, el joven protagonista, un soñador que anhela aventuras más allá de las fronteras de su hogar, se encuentra en un dilema: seguir los pasos de su padre en la agricultura o escapar a lo desconocido en busca de una vida emocionante.