Gene Kelly y Frank Sinatra son dos marineros de personalidades opuestas: uno (Sinatra) es tímido y un tanto ingenuo, mientras que el otro (Kelly) es un hombre de mundo. Ambos vivirán mil peripecias en la ciudad de Los Ángeles.
El detective Mark McPherson investiga el asesinato de Laura Hunt, una elegante y seductora mujer que aparece muerta en su apartamento. McPherson elabora un retrato mental de la joven a partir de las declaraciones de sus allegados. El sugestivo retrato de Laura, que cuelga de la pared de su apartamento, también le ayuda en esta tarea.