En una pequeña ciudad costera, Henry Limpet es un tipo un tanto peculiar: un hombre común que anhela vivir aventuras en el océano, aunque su trabajo en una tienda de artículos de pesca no le da muchas oportunidades. Tras ser rechazado por el ejército debido a su torpe actitud, Henry se siente inútil y frustrado. Un día, mientras pasea por la playa, es empujado al agua y, en un giro mágico, se transforma en una simpática y diminuta criatura marina, un pez.

En un oscuro y peligroso rincón de la sociedad estadounidense, un joven llamado podría ser víctima de un brutal asesinato en un callejón. La escena se convierte en un punto de inflexión en su vida, ya que se jura venganza contra el sistema que lo ha fallado. Tras ser testigo del crimen, decide que está cansado de ser un simple espectador y toma las riendas de su propio destino.