En una vibrante y caótica China de mediados del siglo XX, un joven parisino llamado François, criado en los lujos de la vida occidental, se embarca en un viaje inesperado cuando su madre le pide que regrese a sus raíces y le ayude a recuperar un valioso legado familiar. Con un toque de humor y una buena dosis de desinformación cultural, François llega a un país lleno de contrastes, donde la modernidad y la tradición chocan de maneras hilarantes.