Una serie de asesinatos de jóvenes mujeres está azotando la ciudad de Londres. El Inspector Bellaver (Alfred Marks) está a cargo de la investigación, la cual lo conduce a la mansión del excéntrico Doctor Browning (Vincent Price).
Según el doctor Diablo, existe un show especial, en el que por medio de la tortura, es posible prevenir a la gente sobre los males que les deparará el futuro. Los que se prestan al experimento se muestran en principio escépticos pero, poco a poco, van descubriendo la codicia y la violencia que llevan dentro, e incluso uno de ellos desvela sus instintos más asesinos. Sin embargo, un perspicaz espectador que descubre la verdad que se oculta tras el experimento decide establecer un pacto con el Diablo.
El profesor Christopher Maitland, un coleccionista de antigüedades con tendencias ocultistas, compra una calavera a Marco, un hombre extraño con el que tiene misteriosos tratos. Según Marco, la calavera fue robada de la tumba del Marqués de Sade. Sir Matthew Philips, amigo de Christopher, le advierte del peligro de tocarla, asegurándole que una vez fue suya, pero que se la robaron. Christopher se obsesiona con la calavera, que acaba apoderándose de él y obligándole a cometer una sucesión de horribles asesinatos.