En un Japón feudal marcado por la violencia y la traición, un implacable samurái, conocido por su habilidad con la espada y su despiadada búsqueda de venganza, se ve acompañado en sus aventuras por su pequeño hijo, Daigoro. Juntos, forman un dúo singular: un guerrero solitario que se aferra a un código moral en un mundo corrupto y un niño que simboliza la esperanza en medio de la oscuridad.

En el Japón post-Segunda Guerra Mundial, la vida de los ciudadanos está marcada por la lucha por el poder y la supervivencia. La historia sigue a un exsoldado que se ve arrastrado a un mundo criminal donde las armas, la traición y la lealtad son moneda corriente. Cuando las familias yakuza compiten ferozmente por el control de territorio y recursos, nuestro protagonista se convierte en una pieza clave en este juego mortal.

En un ambiente cargado de tensión y rivalidad, la historia se centra en el violento mundo de los yakuza en Hiroshima en la década de 1970. La trama sigue a un grupo de hombres que juegan al límite, donde la lealtad y la traición son moneda corriente. El protagonista, un líder carismático pero despiadado, intenta unificar a las facciones rivales de la mafia local después de un conflicto que ha desangrado a la comunidad y dejado un rastro de cadáveres.

En un Japón feudal, la paz del imperio está en peligro debido a la resurrección de poderosos demonios que atormentan a las aldeas. Kogoro, un valiente guerrero conocido por su habilidad con la espada, es el último en su linaje de cazadores de demonios. Cuando su pueblo es atacado por un temible yokai que secuestra a la hija de un noble local, Kogoro debe embarcarse en una peligrosa misión para rescatarla y devolver la tranquilidad a la región.