Tras la Segunda Guerra Mundial, Preston Tucker sueña con crear un coche más moderno y estilizado, pero se ve bloqueado por la industria automovilística.
Es la última noche del verano de 1962, y los adolescentes de Modesto (California) quieren divertirse antes de afrontar sus responsabilidades como adultos. Así que todos salen esa noche para beber, ligar, pasearse en coche, ir a la bolera o bailar un rato.