En una ciudad italiana marcada por la decadencia de la década de 1980, un joven artista de 20 años vive atrapado entre sus ambiciones y la dura realidad de su entorno. Cargado de sueños, pero también de inseguridades, comienza a retratar a su vida en cuadros llenos de color y angustia. Sin embargo, su mundo da un giro inesperado cuando se enamora perdidamente de una mujer que alegra su existencia, simbolizando todo lo que desea alcanzar.

En la Italia rural de la posguerra, un niño llamado Gavino vive bajo el yugo de su estricto padre, un pastor que se aferra a tradiciones severas y una brutal forma de crianza. La historia comienza mostrando el contexto áspero y hermoso de Cerdeña, donde la vida parece dominada por la naturaleza y la cultura local. A medida que Gavino crece, se enfrenta a un conflicto interno: la tiranía paterna contra su deseo de libertad y autodescubrimiento.