En el siglo XIII, en la hermosa y caótica Italia medieval, un joven de origen noble, Francesco, vive una vida despreocupada y llena de lujos. Sin embargo, tras la experiencia reveladora de una guerra, su vida da un giro inesperado. Motivado por un deseo de encontrar un propósito más allá de la superficialidad, decide renunciar a su riqueza y emprender un viaje espiritual en busca de una conexión más profunda con Dios y con los que más lo necesitan.