En un pequeño pueblo de México a inicios del siglo XX, un joven campesino llamado Mateo, conocido por su inquebrantable fe y su bondad, lucha por mantener a su familia y tierras tras la devastadora sequía que ha azotado la región. Su vida, marcada por la pobreza, cambia cuando encuentra una antigua cruz en medio del desierto, un símbolo de esperanza y renacimiento que lo impulsa a buscar un milagro.