A principios del siglo XX, en un elegante castillo polaco, la Condesa Stachowska, una mujer fuerte y enigmática, se enfrenta al inminente declive de su noble casa y el impacto de la devastadora Primera Guerra Mundial. Su vida se complica aún más cuando se cruza con la de su hija, Katja, una joven que anhela la libertad y la modernidad, en contraste con las tradiciones que su madre representa.