En un pequeño pueblo de Australia durante la década de 1910, dos jóvenes amigos, Archy y Frank, comparten un profundo amor por el deporte y una fuerte conexión que trasciende su entorno rural. Archy es un talentoso corredor con grandes sueños de competir en los Juegos Olímpicos, mientras que Frank, más pragmático, es el soñador que anhela aventuras más allá del horizonte. La vida de estos dos amigos da un giro drástico cuando estalla la Primera Guerra Mundial y, impulsados por el patriotismo y el deseo de heroísmo, se enlistan en el ejército.

En un contexto de guerra y conflicto, un grupo de soldados australianos se enfrenta a un juicio militar que pone a prueba no solo su lealtad, sino también su moralidad. La historia se ubica durante la Segunda Guerra de los Bóer a finales del siglo XIX en Sudáfrica, donde el combate no solo se libra en el campo de batalla, sino también en la sala del tribunal. Tres jóvenes oficiales, implicados en la ejecución de prisioneros de guerra, son acusados de crímenes de guerra y se ven obligados a defenderse ante un sistema judicial que arde en tensiones políticas y éticas.