En una fría y lluviosa noche en Londres, un hombre llamado Johnny se encuentra en un estado de desesperación y confusión. Tras una ruptura tumultuosa con su novia, decide escapar de su vida en la ciudad para deambular por las calles y entablar conversaciones con extraños. Johnny, interpretado por un fascinante David Thewlis, es un personaje carismáticamente insolente, cuya inteligencia mordaz y comentarios sarcásticos destacan mientras explora los rincones oscuros de la vida urbana y la naturaleza humana.

En una tranquila posada junto al mar, un joven llamado Jim Hawkins lleva una vida sencilla hasta que un misterioso anciano aparece en su vida, trayendo consigo un mapa que promete vislumbrar un tesoro oculto en una isla lejana. A medida que el anciano relata las historias de piratas y aventuras, Jim se siente atraído por la posibilidad de una vida más emocionante. Sin embargo, el antiguo marinero, entre copas y susurros, advierte a Jim sobre los peligros que le esperan.

En esta comedia de enredos, un grupo de criminales ineptos se embarca en un plan de robo que termina siendo más caótico de lo que esperaban. La historia sigue a un grupo de ladrones, liderados por el carismático pero torpe Otto, quien enamorado de la encantadora Wanda, está dispuesto a todo por su amor. Wanda, sin embargo, guarda un secreto que podría complicar aún más las cosas: además de tener un amorío con Otto, también está seduciendo al abogado de su cómplice, el flemático George, para robarle información sobre el botín.

En un futuro distópico, la sociedad está dominada por un régimen totalitario que ejerce un control absoluto sobre la vida de sus ciudadanos. Winston Smith, un trabajador del Ministerio de la Verdad, lleva una existencia monótona y opresiva en la superpoblada y grisácea Londres. Cada rincón de su vida está vigilado por el omnipresente Gran Hermano, figura que simboliza la autoridad inquebrantable del Estado.

En los años 70, un carismático y escurridizo prisionero llamado Norman Stanley Fletcher se encuentra en una cárcel británica cumpliendo una pena por fraude. A pesar de su situación, Fletcher tiene un talento innato para meter en problemas a los guardias y, de paso, ganarse la simpatía de sus compañeros de celda. Con su ingenio afilado y un humor sarcástico, se convierte rápidamente en el líder no oficial de los reclusos, siempre buscando el modo de aprovechar el sistema a su favor.