En un pequeño pueblo francés a orillas del mar, la vida transcurre con un aire de tranquilidad, hasta que un suceso inesperado irrumpe en la monotonía de sus habitantes. Un gendarme local, conocido por su carácter excéntrico y su inquebrantable sentido del deber, se ve arrastrado a una serie de situaciones cómicas cuando, tras una confusión, sus compañeros lo dan por muerto. Se encuentra así con la libertad de vivir como un “desconocido”, libre de las obligaciones y las expectativas que normalmente lo atan.