En el vibrante y bullicioso Dublín del siglo XIX, una joven llamada Molly Malone se abre camino en el mundo con su carisma y su determinación. Trabajando como vendedora ambulante de mejillones y mariscos, Molly no solo es conocida por sus productos frescos, sino también por su belleza y su espíritu vivaz. Sin embargo, la vida en las calles no es fácil y, a menudo, se enfrenta a la despreocupada brutalidad de la clase alta y a la indiferencia de quienes pasan sin mirar.