En un rincón olvidado de la jungla, un grupo de aventureros se adentra en lo desconocido en busca de fama y fortuna. Compuesto por un biólogo excéntrico, un fotógrafo audaz y un documentalista hambriento de acción, el trío se encuentra con una tribu que no solo es misteriosa, sino que también tiene un gusto peculiar por los forasteros. A medida que intentan establecer contacto con los nativos, lo que inicialmente parece un intercambio cultural se transforma rápidamente en una lucha por la supervivencia.
La tribu, conocida por sus tradiciones ancestrales y su peculiar dieta, resulta ser lo último que imaginaban: son carroñeros que han mantenido sus costumbres a lo largo de los años. Mientras se apoderan de la imprudencia de los intrusos, revelan un lado oscuro y grotesco de la civilización que los visitantes no estaban preparados para enfrentar. El biólogo, obsesionado con estudiar las rarezas de la fauna local, ignora las señales de advertencia que sus compañeros empiezan a notar, hasta que es demasiado tarde.
Con un ritmo trepidante y un humor oscuro que desafía la lógica, la película mezcla el horror con la comedia en un espectáculo visual que pone a prueba los límites de la amistad y la lealtad. Cuando las líneas entre cazador y presa comienzan a desdibujarse, los protagonistas se ven obligados a luchar no solo por sus vidas, sino también por su propia humanidad. Una experiencia cinematográfica que, aunque se desarrolla en el contexto de 1930, resuena con inquietantes eco contemporáneos.