Un grupo de estudiantes universitarios decide celebrar la noche de Año Nuevo a bordo de un tren antiguo que ha sido transformado en una lujosa fiesta. Entre risas y bailes, la emotiva velada cobra un giro aterrador cuando un misterioso asesino, que ha sido encerrado durante años en una institución mental, logra infiltrarse en el tren. Este maníaco, con una ficha criminal oscura y un pasado que lo persigue, comienza su cacería, dejando un rastro de cadáveres a su paso.
Mientras los estudiantes disfrutan de la fiesta, la atmósfera festiva se convierte rápidamente en un juego mortal. Los miembros del grupo comienzan a desaparecer uno a uno, y pronto se dan cuenta de que el verdadero terror no es solo la amenaza del asesino, sino también la paranoia que se apodera de ellos. La confianza se quiebra entre amigos, y cada uno se convierte en un sospechoso potencial.
A medida que las víctimas caen y la tensión se incrementa, una joven llamada Alana, que es una de las sobrevivientes, comienza a investigar el misterio que rodea al asesino y el oscuro pasado que une a mucha gente en el tren. Con rumbo a un desenlace sorprendente, Alana deberá usar toda su astucia para sobrevivir a la noche. La película juega con el concepto de la traición y el horror que puede surgir del mismo lugar que debería ser un espacio de celebración y amistad, dejando al público al borde de su asiento.