En una Rusia convulsionada por la revolución y los cambios sociales, una madre trabajadora, dedicada y sacrificada se enfrenta a la cruda realidad de la vida. Ella, que ha luchado toda su vida para mantener a su hijo a salvo y alejado de la mala vida, ve cómo sus esperanzas se desmoronan cuando su hijo se siente atrapado por las influencias de la revolución. La juventud, seducida por la ideología de un nuevo orden, se siente impulsada a unirse a las filas de revolucionarios, lo que lleva a un inevitable conflicto entre las aspiraciones de la madre y los deseos de su hijo.
A medida que la situación se intensifica, la mujer se convierte en un símbolo de resiliencia y amor maternal. Arraigada en la tradición y en el anhelo de un futuro mejor, lucha para entender las razones que impulsan a su hijo a renunciar a su seguridad por un ideal más grande. La historia se desarrolla en un contexto de agitación política y tensiones sociales, donde cada decisión puede cambiar el destino de ambos.
La madre, a través de su dolor y sufrimiento, comienza a entender la complejidad del mundo que la rodea, enfrentándose a un dilema emocional desgarrador. Su viaje es un retrato conmovedor y poderoso del amor incondicional, la lucha por la identidad y el sacrificio, reflejando el espíritu de una era marcadamente transformadora. Todo esto mientras se destaca la importancia de la generacional en un mundo en constante cambio.