En un pequeño y pintoresco pueblo francés, la vida sigue su curso tranquilo y melancólico, donde la rutina de los ancianos es interrumpida por la llegada de una joven y rebelde mujer que decide quedarse un tiempo. Esta llegada no solo despierta los deseos ocultos y las pasiones dormidas de los hombres mayores, sino que también expone las tensiones y secretos que cada uno ha mantenido a lo largo de los años.
Los protagonistas, un grupo de ancianos que ha aprendido a vivir en la sombra de la monotonía, encuentran en la frescura de la joven un motivo para revivir sus sueños y anhelos. Entre conversaciones llenas de nostalgia y momentos de hilaridad, cada personaje revela su historia: desde amores perdidos hasta frustraciones no resueltas, todo en un tono de comedia que contrasta con la melancolía de sus vidas.
Sin embargo, el efecto de la joven va más allá de la simple diversión; desafía la forma en que los ancianos ven el amor y la sexualidad, obligándolos a confrontar su propia realidad. A medida que se desarrollan las relaciones y surgen conflictos inesperados, el pueblo se convierte en un escenario donde la libertad y la pasión desafían las convenciones de la vejez.
Entre risas, lágrimas y un poco de locura, el filme es un himno a la vida y al amor en todas sus formas, recordándonos que nunca es demasiado tarde para sentir y disfrutar de lo que realmente importa.