En esta comedia de enredos, seguimos la historia de un detective de Nueva York, un tanto desaliñado pero encantador, que se encuentra tras la pista de un astuto asesino que tiene un peculiar modus operandi: asesina a mujeres hermosas y las disfraza con un toque teatral. La trama se complica cuando el detective comienza a obsesionarse no solo con el caso, sino también con la madre de uno de los posibles objetivos, una mujer segura de sí misma y con un humor voraz.
Mientras intenta desentrañar el misterio, nuestro protagonista se ve inmerso en un juego psicológico que va más allá de lo criminal, lidiando con sus propios demonios e inseguridades. La tensión entre la comedia y el thriller se intensifica a medida que el detective se enfrenta a una serie de personajes peculiares, que añaden un tono absurdo y divertido a la historia. Con giros inesperados y un guión ingenioso, el relato explora no solo la dinámica entre el cazador y su presa, sino también los altibajos del amor y las relaciones interpersonales.
La película combina elementos de misterio con un humor fascinante, brindando momentos de risas incómodas y reflexiones sobre la naturaleza humana. A lo largo de su travesía, el detective deberá decidir si está dispuesto a arriesgarlo todo por una conexión real, mientras la línea entre la locura y la cordura se vuelve cada vez más difusa. Una obra que, con su tono desenfadado y su crítica social sutil, sigue cautivando audiencias del día de hoy.