En un pequeño pueblo francés sumido en la desesperanza, un grupo de mineros se enfrenta al cierre de la mina que ha sostenido sus vidas durante generaciones. La historia sigue a Marco, un joven idealista que, a pesar de la falta de apoyo, decide organizar una huelga para reivindicar sus derechos y proteger su fuente de trabajo. Junto a él, están sus camaradas de toda la vida: Claire, una madre soltera que lucha por mantener a sus hijos a flote; y Bernard, un veterano con un pasado problemático que encuentra en esta lucha una segunda oportunidad.
Mientras el pueblo se divide entre los que apoyan la huelga y los que prefieren rendirse ante la inevitabilidad del cierre, tensiones familiares y dilemas éticos surgen. La historia se entrelaza con flashbacks de la vida de los mineros, mostrando momentos de camaradería, traición y sacrificio que forjan amistades inquebrantables.
Las imágenes crudas de la lucha diaria complementan una banda sonora potente, que refleja la agonía y la esperanza del grupo. A medida que la resistencia se alarga y la presión externa aumenta, cada uno de los personajes debe enfrentarse a sus propios demonios. El desenlace ofrece una reflexión sobre la lucha de clases, la comunidad y el sacrificio, llevándonos a una conclusión que resonará mucho después de que los créditos comiencen a rodar. La película se erige como un poderoso recordatorio de la resiliencia del ser humano frente a la adversidad, capturando la esencia de una época que muchos preferirían olvidar.