En el bullicioso Nueva York de finales de los años 20, un joven y ágil repartidor de periódicos llamado Speedy se convierte en el corazón palpitante de una comunidad en constante movimiento. Con su inquebrantable espíritu y su bicicleta siempre lista, Speedy no solo entrega noticias, sino que también se enfrenta a las difíciles circunstancias que sufre su barrio, amenazado por el desarrollo urbano y la llegada de los automóviles.
Mientras lucha por salvar el legendario bar de su amigo, un viejo luchador de boxeo que se ha convertido en su mentor, Speedy se ve atrapado en una serie de cómicas aventuras y malentendidos. Su amor por la vida y su inquebrantable lealtad lo llevan a enfrentar a poderosos promotores y a un mundo que parece ignorar lo que realmente importa: la amistad y la comunidad.
A través de persecuciones a toda velocidad y escenas de acción hilarantes, el protagonismo del joven se convierte en un símbolo de resistencia ante el avance del progreso. Con un trasfondo de comedia que recuerda a los clásicos del cine mudo, Speedy no solo nos regala risas, sino también una reflexión sobre el significado de la modernidad y el valor de las conexiones humanas. Con cameos de personajes memorables y un ritmo frenético, esta película nos lleva en un viaje nostálgico que capta la esencia de una era en la que la velocidad y la agilidad podían redefinir el camino de la vida.