En un ambiente gótico y tétrico, un noble británico, iniciales de su nombre L.V., se enfrenta a la misteriosa muerte de su esposa, Ligeia, quien deja su huella en cada rincón de su vida. Por atormentado que esté, L.V. intenta rehacer su existencia con la llegada de una nueva compañera, Verdena, una joven que evoca la esencia de su amada fallecida. A medida que su relación florece, el pasado oscuro no tarda en acecharlos. Extrañas visiones y fenómenos inexplicables comienzan a asediar a L.V., pues la conexión entre el mundo de los vivos y el de los muertos parece ir desapareciendo.
Con un trasfondo de misterio y terror psicológico, la película se adentra en la locura, la obsesión y la inmortalidad del amor que trasciende la muerte. La atmósfera se carga de tensión a medida que L.V. se convierte en un prisionero de sus propios recuerdos, y el espectador se pregunta si será realmente el hechizo de Ligeia lo que persiste en su vida o si su nueva amante oculta secretos oscuros. Los hermosos paisajes de ruinas y la inquietante música añaden cierta magia al relato, llevándonos a un clímax donde se entrelazan realidad y fantasía, revelando que siempre hay un precio que pagar por el amor eterno. Con giros inesperados y una conclusión escalofriante, las visiones del protagonista nos sumergerán en un torbellino de emociones y preguntas sobre la vida, la muerte y lo que se encuentra más allá.