En esta espeluznante secuela, la acción regresa al lago Crystal, donde un grupo de amigos decide pasar un fin de semana de diversión en una cabaña. Sin embargo, esta escapada se torna mortal cuando Jason Voorhees, el icónico asesino enmascarado, resurgen de las profundidades del terror una vez más. Lo que comienza como una típica reunión juvenil entre risas y juegos rápidamente se convierte en una lucha por la supervivencia.
Entre el grupo se encuentra Chris, quien ya tuvo un oscuro encuentro con Jason en el pasado y ahora se siente obligada a enfrentarse a sus demonios. Mientras tanto, el resto de sus amigos son un típico grupo de personajes: el chico atrevido, la chica desesperada por romance y los que solo buscan fiesta. Pero el ambiente festivo se ve interrumpido cuando los cuerpos comienzan a apilarse y la verdadera cara del horror se revela, y Chris debe usar todas sus habilidades para salvar a los que quedan.
Con un giro inesperado, esta entrega también introduce la famosa máscara de hockey que se convierte en un sello distintivo del villano. A medida que la tensión aumenta y la música te pone en alerta, la historia lleva a los espectadores a través de un viaje lleno de sustos, giros y un clímax explosivo que mantiene a todos al borde del asiento. El horror ha evolucionado, y esta vez, es más brillante, más sangriento y definitivamente más mortífero.