La historia se centra en Alex, una adolescente que vive en una zona costera de Uruguay. Desde su nacimiento, Alex ha sido el centro de atención de la familia debido a su condición intersexual, lo que provoca diversas tensiones en su hogar y su entorno. Su madre, una mujer protectora y determinante, ha tratado de criarla en un ambiente de aceptación, mientras que su padre lucha con sus propias inseguridades y expectativas sobre la identidad de su hija.