En un futuro distópico donde la sociedad está al borde del colapso, las calles de Mega-City One son un caos total. La criminalidad está descontrolada y la ley recae en unos pocos jueces que actúan como jueces, jurados y verdugos. Entre ellos, uno se destaca: un implacable juez conocido por su ferocidad y su inquebrantable sentido del deber. Cuando un experimento genético sale terriblemente mal, el caos se desata a gran escala. Un peligroso criminal, condenado a cadena perpetua y con habilidades extraordinarias, logra escapar y plantea una amenaza aún mayor para los ciudadanos.

En un Londres sumido en un futuro cercano y distópico, la ciudad es un hervidero de caos y crimen, donde las lluvias interminables y la oscuridad perpetua crean un ambiente inquietante. En este entorno, el detective de la policía, interpretado por Rutger Hauer, se encuentra en la búsqueda de un asesino en serie que ha aterrado a la ciudad durante meses. Este criminal no solo es astuto, sino que también tiene un retorcido sentido del juego, lo que hace que el trabajo de Hauer sea aún más complejo.

En plena Guerra Fría, un espía británico se encuentra en el centro de una peligrosa conspiración cuando descubre un plan soviético para detonar una bomba nuclear en el Reino Unido. La historia comienza con un misterioso paquete que llega a las manos de un agente del MI5, quien se percata de que se trata de un protocolo secreto diseñado para implementar un ataque terrorista que divida a la nación. La tensión aumenta cuando se revela que un alto funcionario del gobierno británico está involucrado en la trama, lo que plantea un dilema moral sobre lealtades y traiciones.