En Los Ángeles, durante una jornada especialmente agobiante a causa del calor y del colapso del tráfico, de repente, un ciudadano normal se rebela de manera violenta y destructiva contra todo lo que lo rodea. Bill Foster (Michael Douglas) no es más que un hombre corriente que supera como puede las frustraciones de cada día y que lo único que quiere es regresar a casa. Un oficial del departamento de policía (Robert Duvall) intentará poner fin a su violencia y agresividad.
Diana Baylor, una mujer frágil y nerviosa, visita al prestigioso psiquiatra Isaac Barr. La personalidad de Diana, muy marcada por la influencia de un padre incestuoso y violento y por una serie de hechos anómalos, atrae al psiquiatra, que acepta tratarla para averiguar qué se esconde detrás de esa hermosa e inestable mujer. Para Barr, Diana es un desafío. Cansado de casos más o menos previsibles, tiene la oportunidad de adentrarse en una mente oscura y llena de fascinantes recovecos.