Un tren de pasajeros ha sido robado por un experto de electrónica y se ha convertido un centro de la orden no detectable de un satélite de armas. Ha planeado explotar Washington DC y sólo un hombre le puede parar, antiguo SEAL Naval Casey Ryback.
Una monja, mientras consuela a un asesino convicto en el corredor de la muerte, siente empatía tanto con el asesino como con las familias de sus víctimas.
Los hermanos John y Charlie Foster trabajan como policías en el metro de Nueva York. Mientras a uno la vida le va bien, el otro no levanta cabeza y acaba siendo despedido de su trabajo. Se le ocurre entonces asaltar un tren que transporta las recaudaciones del metro. Su principal obstáculo será Donald Patterson, el jefe de la seguridad metropolitana.