Un grupo de abogados se juega su futuro personal y profesional al demandar a dos grandes empresas responsables de contaminar el agua y en consecuencia de quitarle la vida a menores.
Para frustrar un complot terrorista, un agente del FBI se somete a una cirugía de transplante facial y asume la identidad de un cerebro criminal, que asesinó a su único hijo. El plan se torna agrio cuando el criminal se despierta prematuramente y busca venganza.